Recomendaciones para realizar videoconferencias exitosas
Si bien llevamos ya casi dos meses en las que modificamos la modalidad de trabajo y de cursado presencial y lo trasladamos a la virtualidad, todos los días vamos incorporando nuevos recursos, nuevas técnicas, metodologías y con esto, hemos mejorado las clases y las reuniones de trabajo.
Desde el Departamento de Comunicación queremos compartir algunos tips que servirán para algunas instancias de tus clases virtuales para sacarle el provecho a las reuniones de equipo y a las sesiones de estudio.
Elegí un lugar cómodo, silencioso y tranquilo.
Tanto para reunirnos a trabajar, a armar, dictar o presenciar una clase, necesitamos estar en un ambiente que nos invite a estar concentrados.
Si vas a grabar una clase, hacelo cuando tengas tiempo suficiente, ya que la prisa genera nervios. Es recomendable trabajar sin acompañantes, y si sientes que no puedes sola/o, pide ayuda a alguien que te grabe.
Si vas a trabajar con una sesión en vivo, es importante que le comuniques a las personas que están en tu casa que vas a estar trabajando o estudiando para que no tengas interrupciones que te desconcentren o ruidos que te avergüencen.
Conocé la herramienta y realizá una prueba técnica
Si es la primera vez que vas a utilizar Google Meet, hacé algunas pruebas previas, investigá cómo funciona la herramienta de videoconferencia, y si es muy complicado asesorate con los cursos que brinda EaD y luego implementala.
Cuando ya estés canchera/o con su uso, antes de cada sesión probá la cámara y el sonido y luego enviá la invitación para que se unan.
¡No solo comunican tus palabras!
Hay factores como la información que transmitimos por medio de los gestos que contribuyen y completan la comunicación. Esto sucede tanto en la comunicación virtual como en la cara a cara, sólo que en la virtualidad perdemos gran parte de estas señales. Para poder suplir esto, hay algunas técnicas que deberás tener en cuenta.
Vocalizá, modulá y hablá un poco más despacio y lento de lo habitual para que de esa manera tu mensaje llegue con claridad y sin interferencias a los destinatarios.
Te recomendamos que te sientes con una postura erguida y sonrías, dado que esto mejora el tono de tu voz y hace que sea más agradable. Es una manera de generar empatía y en los videos, una sonrisa rompe la frialdad on line y mejora el proceso comunicativo.
Proyectá la voz, hacé pausas, poné énfasis en alguna frase y realizá pequeños silencios. Esto cambiará el ritmo y hará que tus clases sean dinámicas y poco monótonas.
¡Mirá a la cámara! ya sea que grabes una clase, o que mantengas una reunión virtual, o partícipes de una clase tenemos la tendencia de mirarnos a nosotros mismos en la pantalla. De esta manera no le hablamos al otro, sino a nuestra propia imagen. Olvídate de la pantalla y mirá la cámara del dispositivo que estés usando. Así vas a involucrar a tus estudiantes, a tus profes o a tus compañeros de trabajo como si los tuvieras frente a vos. No es necesario que te ubiques totalmente de frente a la cámara, puedes hacerlo ladeándote un poco para evitar el cansancio.
¿Qué hago con las manos y pies?
Si acostumbras a gesticular con tus manos, ¡adelante! Esto suma a tu comunicación no verbal, solo no seas exajerada/o. Si por el contrario te distraen, enfocá y encuadrá la cámara desde tu cabeza hasta la mitad de tu torso, y dejá las manos por debajo, de esta manera no te vas a distraer con lo que hagan tus manos.
Si estás de pie, dejá tus piernas quietas e intentá no moverte mucho, ya que será muy difícil mantenerte en el cuadro de la cámara y quienes te vean perderán la concentración. Si sos inquieto habrá una tendencia a que te muevas hacia adelante (hacia la cámara), intentá evitarlo para que tu audiencia pueda verte de forma más natural.
La práctica hace al maestro, mientras más videos hagas mucho más fácil te será trabajar con estas herramientas.
Imaginemos que vamos a iniciar una videoconferencia, ¿cómo nos preparamos?
Vestite para la ocasión, solo ha cambiado el espacio en el que nos reunimos, no los modales ni los códigos de vestimenta. Es normal que sólo nos ocupemos de lo que se ve en cámara, por lo que puedes estar muy arreglado y elegante (con camisa, blusa, corbata etc.) pero con pantalones cortos pijamas o de jogging y a veces olvidarlo, levantarte y mostrar una imagen tuya que no es la que querés proyectar.
Ubicate en un sitio con buena iluminación. La luz es importante para que te vean bien, lo mejor es tener una luz frontal que ilumine tu cara.
Ingresá con la cámara y el micrófono apagados. Esto te permite controlar lo que otros ven y escuchan antes de que estés listo.
Si ya sabes cómo encuadrarte frente a la cámara, prestá atención a lo que muestras en cámara. Varios estudios muestran que la gran mayoría del tiempo (65%) en una videoconferencia, los asistentes prestan atención a lo que hay alrededor de la persona (tu espacio personal en tu casa). Por lo tanto, buscá un fondo sin distracciones (una pared por ejemplo).
Preparate para la cámara. En el espejo que uses en tu casa chequeá tu peinado y tu aspecto en general. La cámara no es un espejo, y del otro lado hay una o varias personas que te están mirando (y pueden grabarse las clases, y quedan registrado).
Las interrupciones y ruidos en clases o en una reunión (de las que teníamos hace unos dos meses atrás), siempre son incómodas, nos hacen perder el hilo y el tiempo. Por esto es que hay que considerar algunos detalles para minimizar las interrupciones durante una videoconferencia, ya que lo único que cambia es el espacio físico, por el virtual.
Importante: antes de comenzar una sesión de clases, haz una visita al baño (por razones obvias) y a la cocina (trae agua o lo que te guste tomar). Si te levantás en el medio de una sesión es el equivalente a que te vayas en medio de una clase o de una reunión.
Si alguien en tu casa te llama, o te suena el teléfono, pedí permiso y disculpas, apagá el video y el micrófono y luego conversá. Al finalizar tu conversación privada, prendelos nuevamente.
Intentá mantener la atención sólo en la pantalla de la videoconferencia. Por respeto a las personas con las que estás manteniendo la videoconferencia y por una cuestión de concentración. Revisar el celu, los email o las redes sociales, hará que te distraigas y pierdas el foco de lo que estás diciendo o escuchando.
Al trabajar con micrófonos es importante tener en cuenta que reproducimos muchos sonidos involuntarios (pulseras, hojas, movimientos de una silla, etc.) que se transmiten directo a los auriculares de los asistentes. Por ello, conviene evitar el uso de accesorios y cuidar los movimientos que puedan generar un sonido brusco.
Para finalizar esta serie de recomendaciones, es muy importante ser consciente de que estudiar y trabajar virtualmente todo el tiempo es agotador mentalmente y físicamente.
Verse a uno mismo, estar siempre en la misma posición, la vista que se cansa por la irradiación de luz, los problemas técnico, la calidad de la conexión a internet, repetir varias veces lo mismo cuando falla el audio, son algunas de las razones que agotan.
Si vas a pasar mucho tiempo frente a la pantalla, levantá el monitor a la altura de tu cabeza, no cruces las piernas, esto afecta a la cintura y a la circulación.
Es muy importante que hagas descansos. Se recomienda que sean cada una hora. Aprovechá y en ese break levántate, caminá, estirá tu cuello, y si estás con otras personas recarga no solo tu energía sino el agua de tus mates.
Estas pausas activas son muy recomendables, son mini recreos que oxigenan tu cuerpo y mente y te ayudan a mantener videoconferencias exitosas y saludables.